Cuando Hattori Hanzō cruzó Iga junto al futuro sogún Tokugawa Ieyasu en 1582, no pensó que casi quinientos años después surgiría en Sudamérica una nueva casta de guerreros que dicen ser los depositarios de sus técnicas.
Estos ninjas modernos viven ocultos y son parte de una sociedad tan hermética que casi nadie ha tenido la fortuna de conocerlos (es que POCOS revisamos los anuncios clasificados del diario El Extra, donde usualmente su escuela oferta cursos).
En efecto, un día que yo acometí la enriquecedora tarea de leer aquel periódico, mis ojos, luego de pasar por las turgentes partes del cuerpo de una modelo guayaquileña que confesaba estar enamorada de los “morenos sabrosones”, recayeron sobre un anuncio pequeño que, en negritas, decía: “APRENDA 11 ESTILOS DE COMBATE EN 11 DÍAS. Academia de ninjutsu El Hattori Hanzō de Chimbacalle.”
Quizá porque aún no conseguía recuperarme de la conmoción que me ocasionaron las confesiones psicosexuales de la modelo, mi cerebro no fue capaz de procesar bien la información, provocándome una exaltación rayana en la epifanía: ¡debía estudiar con ellos!
Al día siguiente, tomé un bus y atravesé la ciudad de cabo a rabo con la idea de que el horroroso tráfico, el sol canicular y las dos horas de viaje no solo valían la pena, sino que formaban parte de mi entrenamiento como guerrero.
Al llegar a Chimbacalle, lo único que hallé con relativa facilidad fueron las instalaciones del periódico El Comercio; por lo demás, de la escuela de artes marciales nadie había escuchado.
Estaba a punto de claudicar, cuando un muchacho de no más de doce años apareció de la nada dispuesto ayudarme en mi búsqueda. Al principio dudé, pues, en un acceso momentáneo de paranoia, creí ver que guardaba un picahielos bajo su camiseta.
Sin embargo, arriesgándome, dejé que el niño me condujera hasta el portal de una tienda de discos piratas.
— ¡Aquí es!
Estaba seguro de que me tomaba el pelo porque lo único que había allí eran películas pornográficas.
— Entre, en serio es aquí – afirmó –; el maestro Gualotuña siempre nos dice que no debemos juzgar al caramelo por la envoltura.
Subyugado por ese aplastante aserto, obedecí y juntos, mi guía y yo, sorteamos una serie de estantes donde se alineaba toda la filmografía del porno mundial: japonés, alemán, francés, estadounidense, soft, hard, gorno…
Al fondo del local, franqueamos una puerta mal pintada, encontrando finalmente un dojo cuyo tatami alguna vez fue café y ahora solo era sucio; sobre él, un individuo de unos veintidós años meditaba en posición de loto, al tiempo que los ojos de Rafael Correa y Jean Claude Van Damme lo miraban desafiantes desde dos pósteres pegados en la pared de atrás.
El niño lo llamó con mucho respeto y la única respuesta que obtuvo fue un gesto para que guardase silencio.
— Tenemos que esperar, el maestro Gualotuña se pone bravo si le jodemos cuando está llegando al Nirvana.
Me puse a reflexionar en silencio mientras aguardaba mi turno para ser iluminado. Una hora más tarde, luego de que la humedad de la escuela me desató la rinitis y de que un par de clientes, que habían ido a comprar pornografía, interrumpieron el sagrado ensimismamiento del ninja, finalmente conversamos.
Me dijo que la tarifa era de quince dólares mensuales, además de un monto de treinta que se debía pagar una sola vez como inscripción; también explicó que su disciplina era férrea y que, de vez en cuando, me vería obligado a realizar ciertos “trabajos” en el mercado de San Roque como parte del entrenamiento.
— No te asustes – me dijo –, no se trata de robo, estamos cobrando deudas justas y nunca estarás solo, siempre mando a mis guerreros juntos, por si acaso.
De pronto, un ruido que provenía del local de películas porno nos hizo despertar de nuestro éxtasis místico. El maestro Gualotuña y su alumno salieron del dojo; escuchándose, en seguida, discusiones, gritos.
Movido por el miedo y la curiosidad, me asomé y pude ver a un sujeto escuálido y mal encarado que increpaba al ninja porque, según afirmó, este había tenido un affaire con su esposa mientras él estaba de viaje en Otavalo.
Las argumentaciones del maestro no fueron suficientes para el marido y en un abrir y cerrar de ojos se desató una pelea. Yo imaginé que iba a asistir a una escena de alguna película de Jet Li, pero no fue así: Gualotuña y su discípulo quedaron fuera de combate en menos de dos minutos. El agresor, insatisfecho, se dedicó a derribar todo lo que estaba a su paso y transformó la tienda en la ruina de un castillo japonés.
Cuando el silencio volvió a reinar en el lugar, me atreví a salir del dojo y pasando sobre las películas pisoteadas, los estantes caídos, los vidrios rotos y los luchadores heridos, me marché de la tienda sin mirar hacia atrás por miedo a que las Valquirias apareciesen y, confundiéndome con un guerrero caído, me llevaran al Valhalla.
¡Estos guerreros (análogos a los de Chimbacalle) a cualquiera le inspiran miedo!
¬¬
Today, I went to the beach front with my children.
I found a sea shell and gave it to my 4 year old daughter and said «You can hear the ocean if you put this to your ear.» She placed the shell to her ear
and screamed. There was a hermit crab inside and it pinched her ear.
She never wants to go back! LoL I know this is totally off topic but I had to
tell someone!
Me gustaMe gusta
Great tremendous things here. I am very happy to peer your post. Thank you so much and i am having a look forward to touch you. Will you please drop me a mail?
Me gustaMe gusta
Go to System=> Cache Management and enable the caching features.
Another way you can update your site is to regularly check and improve upon your website’s SEO status. This will most certainly increase your chances of conversion.
Me gustaMe gusta
You need to be a part of a contest for one of the finest
sites on the internet. I will recommend this site!
Me gustaMe gusta
Hey! I know this is kinda off topic but I was wondering if you knew where
I could locate a captcha plugin for my comment form?
I’m using the same blog platform as yours and I’m having trouble finding one?
Thanks a lot!
Me gustaMe gusta
Excellent post. I used to be checking constantly this weblog and
I’m impressed! Extremely helpful info specifically the ultimate part 🙂 I take care of such info much. I used to be looking for this certain info for a long time. Thanks and best of luck.
Me gustaMe gusta
Hello! I know this is somewhat off topic but I was wondering
which blog platform are you using for this site?
I’m getting sick and tired of WordPress because I’ve had problems with hackers and I’m looking at alternatives for another platform. I would be awesome if you could point me in the direction of a good platform.
Me gustaMe gusta
Hi, its pleasant paragraph about media print, we all know media is
a great source of information.
Me gustaMe gusta
Hi there, just became aware of your blog through Google,
and found that it is truly informative. I am gonna watch out
for brussels. I will be grateful if you continue this
in future. A lot of people will be benefited from
your writing. Cheers!
Me gustaMe gusta
La leyenda del shinobi de Chimbacalle | LA RUE MORGUE, interesante. Me encanta vuestra web.
Me gustaMe gusta
I’m not that much of a online reader to be honest but your
blogs really nice, keep it up! I’ll go ahead and bookmark your website to come back down the road. Many thanks
Me gustaMe gusta
I do agree with all the concepts you have offered on your post.
They are very convincing and can definitely work. Nonetheless,
the posts are too quick for starters. Could you please prolong them a bit from subsequent time?
Thank you for the post.
Me gustaMe gusta
These are in fact wonderful ideas in concerning blogging.
You have touched some good factors here. Any way keep up wrinting.
Me gustaMe gusta